¿QUÉ ES?
El Síndrome de Haglund o Espolón Aquíleo es una calcificación en la inserción del tendón de aquiles. Esta calcificación puede deberse a diversos factores, entre los que se incluyen estímulos compresivos o de tracción repetidos que superan las capacidades tensiles del tendón.
SÍNTOMAS
- Dolor local insercional en el talón
- Dolor a la palpación
- Bulto / protuberancia ascendente
- Limitación de movilidad a la elevación de la punta del pie
- Pérdida de funcionalidad para «ponerse de puntillas»
- Enojecimiento y rozaduras calcáneas
- Limitaicón funcional en la transmisión de fuerzas del tríceps sural.
¿CUÁNDO APARECE?
La presencia del síndrome de Haglund indica que ha existido una tracción continua y repetitiva del tendón de Aquiles en su inserción calcánea y, con el paso del tiempo, ha ocurrido como en el resto de calcificaciones tendinosas; la cristalización de calcio sobre el tendón con el fin de “endurecerlo” ante dichas tracciones. Si quieres saber más sobre las calcificaciones, ¡sigue a su post!
Por tanto, el Síndrome de Haglund puede aparecer en entesopatías aquileas o coexistir con otros cuadros clínicos como la fasciopatía plantar.
TRATAMIENTO
El tratamiento de Fisioterapia consistirá en lograr una correcta transmisión de fuerzas en la inserción aquilea y disminuir los factores que puedan estar generando una sobrecarga mecánica.
Para ello, la educación, el automajeo y autoeficacia, y una correcta gestión de caras mediante ejercicio serán los pilares de la recuperación.
La cirugía en el Síndrome de Haglund NO se contempla como primera opción terapéutica.